Se estima que cada año, del 5 al 20% de la población en México se infectará con el virus de la influenza. Las personas más vulnerables son los mayores de 65 años ya que a esa edad el sistema inmunológico se debilita.
Los síntomas más comunes por la influenza suelen ser fiebre, tos, dolor de garganta, dolores musculares y cabeza. Pero ¿Por qué tantos síntomas? ¿Qué provoca que nos duela tanto el cuerpo?.
El virus de la influenza causa infección en el tracto respiratorio, es decir en nariz, garganta y pulmones. El virus suele transmitirse a través de los dedos o gotículas, para llegar a las membranas mucosas y luego viajar por el tracto respiratorio, finalmente se adhiere a las moléculas específicas en la superficie celular.
Este proceso puede causar daño pulmonar, a lo cual la respuesta inmunitaria comienza involucrando células como los macrófagos y los neutrófilos. Estas células son capaces de detectar la presencia del virus.
El proceso de eliminación del virus o también llamado “combate” donde nuestro sistema inmunológico comienza a eliminar el virus puede crear un gran daño pulmonar, este puede provocar dificultades al respirar, además de acumulación de mucosidad y dificultad para respirar. La mucosidad y la tos son un reflejo para tratar de despejar las vías respiratorias.
¿Por qué te duele la cabeza?
El combate de la infección provocada por las respuestas de tus células a la lucha contra el virus, no solo genera reacciones en los pulmones, también en el hipotálamo, el cual se encarga de regular la temperatura corporal.
El combate o también llamado “factor de necrosis tumoral alfa” también puede causar fiebre y pérdida de apetito, fatiga y debilidad durante la influenza y otros tipos de infección.
Por lo tanto, la próxima vez que te preguntes ¿Por qué me siento tan mal? recuerda que tu cuerpo está peleando una gran batalla para eliminar a los invasores de tu cuerpo. Está combatiendo la propagación del virus en tus pulmones y aniquilando las células infectadas.